Cómo detectar la suplantación de un sitio web por medio de un dominio falso.
La seguridad en internet es una problemática que sigue afectando a cientos de miles de personas a diario en el mundo. La incursión recurrente de ciberdelincuentes en la web es una amenaza no solo para el buen funcionamiento de los equipos sino también para la información personal de sus dueños.
Sin embargo, en medio de hackers y malware, uno de los métodos más utilizados en los últimos años para hacerse con datos privados de las personas es la suplantación de sitios web, una técnica de ciberdelincuencia que cada vez deja más víctimas en la red.
Por esto, Infobae trae una guía completa para aprender a identificar cuando una página web puede ser falsa:
¿Qué son los dominios falsos?
De acuerdo con un informe publicado por Digital Shadows, las empresas adscritas a esta plataforma, al año, pueden sufrir un promedio de mil suplantaciones de dominio; un número que muestra a grandes rasgos y de forma preocupante la forma en que los ciberdelincuentes ven en esta treta una oportunidad de “oro” para hacerse con la información personal de sus víctimas.
Por medio de un dominio falso, un hacker puede inyectar un malware (virus informático) con el cual puede colocar en riesgo la privacidad y seguridad de las personas. Asimismo, puede ser utilizado con fines de competencia desleal, pues una empresa puede contratar ciberdelincuentes para suplantar a una competidora, y de esta formar dañar su imagen ante las demás personas.
Sin embargo, la razón principal por la que los atacantes usan esta herramienta es para vulnerar la seguridad de los servicios financieros, con un 20 % de las víctimas totales. Por supuesto, para un ladrón lo más importante es conseguir formas de hacerse con cuentas y claves bancarias y de esta forma poder desviar el dinero depositado en las mismas.
¿Cómo detectar un dominio falso?
Como su nombre lo dice, un dominio falso es la suplantación que los hackers hacen de algunos sitios, con representaciones casi exactas de sus dominios web. Además, al interior de la página suelen recrear de forma genuina a las webs originales, haciendo que los usuarios tengan total confianza en esta copia.
Por esto, es importante que antes de suministrar datos personales o aceptar algún término y condición, se pueda analizar de forma exhaustiva el dominio de la página web. Tal como ocurre con la suplantación en los correos electrónicos, lo primero que se debe hacer para hallar un dominio falso es verificar que la dirección esté bien escrita y tenga concordancia total con la página en cuestión. Muchas veces se pueden descubrir por una letra o número que simplemente no encaja con el nombre oficial de la empresa u organización que debería representar.
Además de esto, también es bueno dar un recorrido completo por la página e intentar identificar irregularidades en su interfaz o formularios. Por ejemplo, si usted va a pagar su cuenta de crédito y nota algo diferente en la página web de su banco, lo ideal es que se retire de allí y verifiqué personalmente o por teléfono si la entidad realizó algún cambio en su sitio web. Cabe recordar que, en este tipo de casos, son los mismos bancos los que avisan a sus usuarios, ya sea por correo o por mensaje de texto los cambios que tendrá la página en un futuro.
De esta forma podrá proteger su información personal y en muchos casos su dinero. Recuerde, lo mejor es tardar un poco más revisando la dirección del dominio y la página, que perder su derecho a la privacidad.